miércoles, 6 de febrero de 2019

TAJODEQUE


Otro extraordinario enclave dentro de la antigua isla de Benahoare (La Palma)


Se trata de un yacimiento de primera magnitud ubicado a más de 2.000 m de altitud, en la base de un roque de lava y toba volcánica y llegar hasta este conjunto resulta sumamente peligroso.


Aquí podemos encontrar una extraña cueva y sobre ella, Las únicas inscripciones o paneles de Líbico-bereber que podremos encontrar en la actualidad en la isla. Dichos paneles son 4 y se localizan sobre la cornisa y en el interior de una cueva.


La propia caverna tiene una disposición que mira hacia el este/sureste, justo al lugar por donde asoma el Sol del amanecer del solsticio de verano. En cuanto a los paneles, en el exterior lo conforman unos 16 motivos silábicos, acompañados de otros 6 símbolos geométricos en forma de círculos, círculos concéntricos, reticulares y espirales. Nada más entrar en la cavidad, encontramos uno de los paneles, formado por 9 caracteres. Los paneles 3 y 4 se ubican en la pared del fondo, conformados por 5 y 6 caracteres.
Pero... ¿Por qué únicamente esta escritura aquí en toda la isla?
¿Tuvo esta cueva un carácter especial?

También en el exterior de la cavidad parece conformarse una serie de canales y posibles cazoletas, no podemos confirmarlo ya que los desprendimientos son frecuentes, alterando de forma importante la superficie de la toba.

En el solsticio de verano se puede observar una sensación indescriptible cuando el Sol hace aparición justo en frente y el panel exterior comienza a iluminarse, poco a poco, de arriba a abajo.

Si realizamos misma operación en el solsticio de invierno, el amanecer se produce por detrás de la isla de Achinech (Tenerife), situada estratégicamente sobre un hueco de la degollada justo enfrente. 
En este momento, de una manera asombrosa, se iluminan los dos paneles que se encuentran en el fondo de la cavidad.

Esto es algo simplemente majestuoso, que pone en relieve la complicada sociedad de los antiguos benahoritas. Parece ser que vivieron contínuamente ligados a los astros, por ello no extraña esa expresión que utilizan algunos: "Los benahoritas eran astrónomos".


TIERRA DE AGUA Y FUEGO


¡Cuanto misterio esconde Benahoare! testigos una vez más de un magnífico enclave que pone en relieve la enigmática sociedad de los antiguos Awaras. Descubierto muy recientemente, hablamos en esta ocasión de un conjunto de cazoletas y canales labrados sobre toba volcánica y con ligera pendiente.


Algunos expertos interpretan este conjunto como un mapa rupestre de la antigua Benahore (Actual isla de La Palma). La morfología del conjunto se asemeja a un triángulo con con cuatro canales concéntricos. En su interior destacan dos cazoletas que se atribuyen a hitos geográficos de la isla como la Caldera de Taburiente o el volcán de San Antonio.


En exterior varias cazoletas y un soliforme, también con cuatro canales concéntricos, que coincide con la posición de la salida del sol. También existe en ella una inscripción alfabetiforme, que según algunas fuentes que nos comentaron... tiene relación con algo "maligno", o como protección sobre algo "malo" (Tal vez protección sobre la actividad volcánica y visible del lugar) lógicamente no podemos asegurar tal cosa. Además la teoría sobre un antiguo mapa de la isla nos resulta algo arriesgado, no creemos en ello aunque las similitudes son considerables, pero ciertamente cualquier interpretación es válida hasta que no se demuestre lo contrario.


Es curioso observar desde aquí cómo es posible ver a simple vista la mitad oeste de la isla, donde aconteció los últimos episodios eruptivos de Benahoare. Y para observarla en su totalidad sólo hay que subirse a los puntos más altos de la cumbre. ¿Y si los ciclos eruptivos acontecidos en el sur de la isla durante siglos atrás y visibles desde aquí... fuesen el motivo de este conjunto? ¿Por qué no hay grabados espiraliformes o meandriformes aquí y tan comunes en la isla? grabados que van asociados de algún modo al agua.¿Y si el protagonista aquí no fuese el agua sino el fuego?..


Son muchas las preguntas que vienen a la cabeza interpretando el jugar, sólo conjeturas. Lo cierto es que hoy el ser humano tiene respuesta para todo, es una acción geológica en este caso pero... ¿Qué pensarían los antiguos al ver un volcán en erupción?. Tierra que escupe fuego, humaredas, lluvia de cenizas, acompañados probablemente con temblores asociados a las erupciones... no es de extrañar que lo relacionasen con algo extraordinario, obra de los dioses, ¿Maligno tal vez?...


Sea lo que sea el conjunto se antoja complejo y como decimos, ello pone en relieve una vida social enigmática, en simbiosis con el medio que lo rodea. Son muchas las preguntas sin respuestas, esperemos que los años venideros arrojen algo más de luz sobre la vida espiritual de los Awara y los antiguos canarios en general. Benahoare fue y es tierra de agua... pero también fue tierra de fuego.

UN YACIMIENTO QUE AGONIZA

"Risco del Drago" se desangra, otro yacimiento que agoniza en la antigua isla de Canaria.


Hablamos en este caso de un conjunto de ocho cuevas naturales y artificiales de diferentes medidas con aprovechamientos habitacionales y silos, algunas con restos de muro de piedra seca y ubicadas en diferentes solapones. Se aprecia que algunas cuevas han sido reutilizadas en épocas históricas.


Este poblado presenta en la actualidad un estado de deterioro muy avanzado debido a los desprendimientos que hoy hacen imposible acceder a la gran mayoría de las cuevas. Las pocas cavidades accesibles están repletas de basura y hoy es hogar de indigentes y toxicómanos.


Esta zona fue uno de los entornos de más pronta invasión castellana debido a la cercanía del nuevo asentamiento y su aptitud como camino para acceder al interior de la isla.


El caudal contínuo que discurría por el barranco fue aprovechado por la nueva población para el establecimiento de ingenios azucareros en los años inmediatos a la invasión. Hoy estos caudales están canalizados para riego de fincas de plataneras.


Así describe Gómez Escudero este paraje:
"Era un hermoso valle de gran cantidad de palmas i dragos, higueras i sauces, i agua que corría siempre a el mar de un arroio llamado Geniguada, esto es, a la falda de un cerro que corre de Norte a sur por legua y media poco más, hasta encontrar con el paso peligroso de un risco alto i tajado que cae a el mar. Tiene esta ribera de ancho de dos a tres tiros de piedra, onde se cituó el Real, llamado de las Palmas; dispúsese hacer iglesia en una casa canaria" [Gómez Escudero (ca. 1484) 1993: 393].


Hoy vemos con mucha tristeza su muerte, otro enclave prácticamente desaparecido, testigo de los primeros episodios de la invasión castellana y su cercanía al Real de Las Palmas fue su condena.
Ocupada casi de forma inmediata tras la invasión y continuamente reutilizadas en diferentes épocas.
Pero ya hoy nadie mora en ellas, nadie se acuerda de ellas, simplemente... desapareció para siempre de tu pasado.



«e que los canarios llamaban a do se asento el dicho Real y es esta ciudad ni gui ni guada que en su lengua dellos quiere decir alla pardelagua de la mar» [PHMFG (1526) 1891, III: 216].

BELMACO


El Parque arqueológico de Belmaco es, sin ningún género de dudas, uno de los yacimientos precoloniales más emblemáticos de Benahoare (Actual isla de La Palma). Se trata del primer yacimiento arqueológico descubierto en Canarias. El conjunto está formado por una preciosa estación de grabados rupestres geométricos que cuenta con 4 paneles en los se representan, sobre todo, espirales, círculos concéntricos y meandriformes. La cueva principal, con una longitud de 35 metros y una apertura de 10 metros, presenta unas magníficas condiciones de habitabilidad y fue ocupada de manera permanente por los benahoaritas. La leyenda sostiene que fue el lugar de habitación de los capitanes del cantón de Tigalate, que eran dos hermanos conocidos por Juguiro y Garhagua.





Otro dato interesante es que en el interior de la cavidad también se llevó a cabo el enterramiento de una persona. Por todas esta y otras evidencias, también se ha relacionado estas cuevas como lugar de santuario mágico-religioso.  Además el yacimiento presenta un pequeño museo representativo con información y piezas muy interesantes. Desde aquí aconsejamos a todos visitar el enclave y admirar la antigua vida Benahorita por el módico precio de 3€. Cuando se iniciaron las primeras catas arqueológicas, se descubrió que la acumulación de sedimentos en la que había que trabajar tenía un espesor de cuatro metros. En el entorno de la Cueva de Belmaco, se han descubierto otras cuevas funerarias.

Más datos, en 2013, se hallaron trazas de presencia y usos indígenas en lugares en los que nunca se habían realizado prospecciones. Un estudio en profundidad de la zona ha permitido saber que las cuevas de habitación (habitadas y habitables) suman una docena, que también hay cinco asentamientos pastoriles, junto a la referida cueva de enterramiento. El Benahorita ocupó todo tipo de cuevas naturales por muy precarias que fuesen sus condiciones de habitabilidad; de esta forma, junto a la gran cueva de Belmaco encontramos otra gran cueva que sirvió de vivienda, tal y como lo confirma la cantidad de material arqueológico aparecido en su interior y en los alrededores de la misma.


Los lugares preferidos para establecerse eran las cuevas naturales situados entre la orilla del mar y los 500 metros de altitud, ubicados en los márgenes de los barrancos, en los acantilados, en las coladas lávicas, en los conos volcánicos, etc. El gran número de cuevas naturales, la ocupación sistemática de todo tipo de estas cavidades, la extensa superficie que ocupan los poblados de cabañas de piedra seca, la riqueza en restos arqueológicos superficiales de todo tipo, así como la abundancia de recursos naturales, está indicando una alta densidad de población en el canton de Tigalate, hoy el actual municipio de la villa de Mazo.

En cuanto al significado de los petroglifos, la interpretación ha variado al paso del tiempo, así, para José Viera y Clavijo, historiador del S. XVIII las inscripciones de Belmaco... "no parecen sino unos garabatos, juegos de casualidad o de fantasía de los antiguos bárbaros".


En 1.724 el obispo D. Antonio Tavira y Almazín piensa que "... los signos podrían ser caracteres de una verdadera escritura" y, además, opinaba que pudieron "...haber sido realizados por aventureros fenicios". El interés de estas inscripciones fue tan que en 1.859 se enviaron unas reproducciones a la Real Academia de Historia que dictaminó lo siguiente: "...Se trataba de signos convencionales, y que no se podían determinar a qué género de escritura correspondían".
En la actualidad los grabados se interpreta como el resultado de prácticas sagradas de los antiguos pastores Awaras. Se pretendían con ellas, favorecer los fenómenos naturales implicados en la supervivencia y la de su ganado (Que manen las fuentes, lluvia para sus campos, ganado fértil y sin enfermedades, etc.


Concluimos esta publicación con una leyenda local: 
En la Villa de Mazo, Tigalate en la legua Awara, vivía la princesa Arecida, mujer hermosa y de raza pura, hermana del capitán Gerehagua jefe de Belmaco y de todo Tigalate.
Amiga de un cristiano herreño de nombre Jacomar, bajaron a la costa donde se encontraron castellanos que venían en busca de agua y alimentos. Estos hicieron presa de ambos para su posterior venta como esclavos.


Jacomar informó a los castellanos que él era cristiano y que no podía ser vendido como esclavo y en la desconfianza del momento, le pidieron que asesinara a Arecida para demostrar la veracidad de sus palabras. Este asestó varias puñaladas a la princesa dándole muerte en el lugar.
En 1445, Jacomar vuelve a La Palma y hace amistad con un indígena de su misma edad al que cuenta la historia del asesinato, sin darse cuenta de que ese hombre era el enamorado de Arecida, este, por venganza da muerte al asesino de su amada.
La princesa era tan querida y admirada en la isla, que dio nombre a un pago de Tijarafe -ARECIDA- y su vengador dio nombre a una montaña y a una fuente de la Villa de Mazo, Tiramazán.


..TAN CERCA DEL CIELO.


Bien es sabido que los antiguos canarios elegían zonas altas para expresar diferentes manifestaciones o demandas, ya sea erigiendo algún tipo de construcción o simplemente a modo de diferentes representaciones como grabados, cazoletas, canales, etc.


Y qué mejor lugar para ello que las cimas de determinadas montañas, tan cerca del cielo y por lo tanto de los dioses, hay ejemplos es todas las islas.


La montaña que nos ocupa se antoja misteriosa, muy rocosa y donde a primera instancia nos llama la atención que por el tipo de roca se encuentra tapizada de blanco.


Dicha montaña, dentro de la antigua isla de Canaria, debió tener un carácter especial, en ella podemos encontrar un numeroso conjunto de petroglifos de formas variadas, desde circulares, ovoides, geométricos, etc. Muchos de ellos ejecutados con una asombrosa perfección donde destaca también la profundidad de los mismos.


Especial mención también a las dimensiones de estas manifestaciones, de considerable tamaño, algunas desde los 30 cm hasta los 2 metros la mayor de ellas.


Pero... ¿Por qué en esta montaña? tan incómoda para transitar sobre ella debido a la gran cantidad de piedras, sin espacios cómodos o abiertos que nos puedan indicar algún tipo de reunión, y no menos importante... ¿Por qué tantas manifestaciones? contabilizando unos 50 grabados que como decimos, con diferencias notables en sus tamaños.



Algunos se encuentran escondidos entre rocas o debajo de ellas, y aunque la gran mayoría se encuentran ejecutados en un plano horizontal, unos pocos se ejecutaron de forma vertical.
En referencia a su contexto, se encuentra cercana a una zona de cuevas funerarias y de habitación, ¿Tal vez tengan alguna relación con el mundo de los muertos? ¿O tal vez se trate de cultos a Magec?...



Recordemos algunas citas de las crónicas escritas:
(…) Tenían casas donde se encomendaban al Dios que estaba en lo alto, que decían Almogarén, que es, Casa Santa, las cuales rociaban todos los días con leche. (Abreu Galindo, 1977:156). 
(Esta teoría la desechamos debido a la inexistencia de cazoletas y/o canales).


En referencia del culto al Sol de los canarios:
(...) Acorán, por tanto, figuraría materializado en el Sol, siendo muy probable la vinculación del "astro reina" al principio femenino de la fertilidad, pues los vínculos existentes entre los indígenas y el mundo bereber así parecían indicarlo (A. Tejera Gaspar, 1995: 14, 139, 144).

En este sentido, podríamos decir que las maguadas eran sacerdotisas dedicadas al culto solar, donde el ritual aparejado a su culto, sólo podría ser efectuado en exclusividad por muchachas vírgenes. La atribución del principio femenino del Sol podría observarse en el ejemplo siguiente, donde la resistencia de los grancanarios a dejar sus ancestrales creencias ante el empuje del proceso evangelizador europeo ha provocado un fenómeno de coalescencia:


"(...) que ninguno de los canarios fue christiano, porque fueron muy tercos [y] sólo a la Madre de Dios era a quien hacían sus fiestas y regocijos, de luces y hogueras" (T. A. Marín de Cubas, en A. Rumeu de Armas, 1986:96).

¿De qué se trata entonces? ¿Que ocurría en la cima de esta montaña?
Una cosa es evidente, conocemos poco de la vida diaria de los antiguos, pero de su vida espiritual conocemos menos aún, todo rodeado por un incómodo misterio.



Lo que indica que apenas hemos despegado en el enigmático y oculto viaje al mundo espiritual de los antiguos canarios.